La elaboración de cerveza precisa germinar granos de cebada y secarlos rápidamente. Pero este proceso, denominado malteado, desactiva las enzimas, por lo que en muchas ocasiones los fabricantes de cerveza se ven obligados a comprar suplementos de enzimas para mejorar su producción.
Además, la cebada de EE.UU. y Australia tiene otro enemigo: la Rhizoctonia, virus al que todavía no se le ha encontrado un remedio eficaz. Los fungicidas son una opción costosa, la rotación de cultivos no es efectiva, y la mejora de la cebada por vía convencional no ha cosechado éxitos.

La solución a estos dos problemas podría estar en la moderna biotecnología. Así, equipos de investigadores de Carlsberg y de las universidades de Washington (EE.UU.) y Giessen y Friedrich-Alexander de Nuremberg (Alemania) estarían ensayando diversos tipos de cebada mejorada genéticamente para resistir el virus de la Rhizoctonia y con enzimas más resistentes al calor.
Ahora habrá que esperar a ver si aparecen efectos secundarios no esperados.
La noticia está tomada del portal
Agroinformación.
1 comentarios :
esta muy buena la sintesis
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